Ya lo dijo Satya Nadella, CEO de Microsoft: Hemos visto lo equivalente a dos años de transformación digital en dos meses. La pandemia ha trastocado nuestra cotidianidad en toda forma posible, desde nuestra vida laboral y personal, hasta la manera en la cual consumimos. De esto, un fenómeno evidente es el auge del comercio electrónico.
En México, el comercio digital ha venido creciendo de forma sostenida en los últimos años: 20% en 2017, 24% en 2018 y 28.6% en 2019. Sin embargo, según un reporte de la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO), en México, durante esta crisis, las compras en línea de comida a domicilio se han incrementado 40%; de moda, 30%; de supermercado, 28%; de productos de higiene, 26%, y de eléctricos, 24%. Asimismo, una encuesta realizada por Kantar registró que el 57% de los compradores en México seguirían utilizando métodos de pago electrónicos una vez acabada la pandemia.
Cabe mencionar que un impedimento para que el comercio electrónico crezca de forma más pronunciada es la baja bancarización de nuestra economía. Tanto México como Brasil, las economías más grandes de Latinoamérica, cuentan con las penetraciones de crédito y débito más bajas per cápita en comparación con los mercados más grandes en comercio electrónico.
Asimismo, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares 2019 (ENDUTIH), elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), 70.1% de los mexicanos son usuarios de Internet (80.6 millones), un porcentaje considerablemente inferior al de Corea del Sur (96%), Reino Unido (94.9%) y Suecia (92.1%). Destaca que el principal medio de conexión sea el celular inteligente (95.3%) y que solamente la mitad de los hogares mexicanos dispongan de Internet.
Imagen cortesía de Prachatai.
