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La improvisación en la política es un suicidio

Jorge Estopellán Guzmán

“No hay nada fácil en política. Y hay mucha gente que se cree que se puede improvisar, pero no se puede improvisar. Hay que tener muy pensado a donde se quiere ir” Manuel Fraga Iribarne.

Dentro de cuatro meses (domingo 06 de junio), se definirán en el estado de Guanajuato: 46 ayuntamientos; 15 distritos federales; 22 distritos locales. La contienda electoral hará que el electorado pueda decidir entre al menos 10 opciones de partidos políticos y varios de los casos también con el modelo de candidatura independiente.

Literalmente, miles de personas (por aquello de las candidaturas a regidores) llevarán su nombre en la boleta electoral, mostrarán su foto en propaganda de campaña, recorrerán secciones electorales con la finalidad de conquistar voluntades. Uno y solo uno por cada cargo a contender será el ganador, la pregunta del millón es: ¿El ganador es el más preparado para representar al la ciudadanía en el Congreso de la Unión, en el Congreso del estado o en el ayuntamiento?.

La política debe verse como una profesión (porque lo es), una actividad humana que mas allá de que la gente con vocación de servicio pueda hacerlo, sea una actividad que quien la ejerza sea el mejor en lo que hace. Cuando algo trágico pasa en un hospital, la primera interrogante es sobre el médico, su preparación y hasta se pone en tela de juicio su experiencia; Cuando un edificio se cae en un terremoto, la gente se pregunta quien fue el ingeniero civil. En política, debemos asumir la costumbre de tener en un minucioso escrutinio a quienes deciden pedir el voto para asumir un cargo de representación popular.

La improvisación nos ha costado y mucho a los guanajuatenses, han llegado a cargos quienes no tienen idea de lo que hacen y que no tienen la intención de ser un funcionario competitivo.

Hay personas que ponen en tela de juicio el funcionamiento de los partidos políticos, lo hacen mas por el momento que pasa la política mexicana, en honor a la verdad, los partidos políticos son el mejor mecanismo para tener personas que afinen su don de servicio, mantengan una constante preparación, pongan en práctica de manera permanente trabajos que de otra manera se ven fingidos en época electoral, preparar militantes durante años es la mejor manera de erradicar la improvisación, buscar que cada militante encuentre sus fortalezas, sus debilidades y prepare sus proyectos es la mejor manera de erradicar la improvisación política. Tener contiendas internas en períodos electorales y que gane el mejor en cada partido, es la mejor manera de erradicar (o al menos disminuir) la improvisación electoral.

 

*Presidente del IRH filial Guanajuato

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