
Lunes 7 de abril de 2025, los mercados bursátiles globales experimentaron una drástica caída, conocida como “Lunes Negro», en respuesta a la creciente incertidumbre sobre la economía mundial debido a las políticas comerciales emitidas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. El temor a una recesión global se intensificó tras el anuncio de nuevos aranceles aplicados por el gobierno estadounidense, lo que desató un fuerte pánico en los mercados financieros de Asia y Europa.
El desplome fue particularmente pronunciado en las bolsas europeas, donde el índice paneuropeo Eurostoxx 600 perdió aproximadamente un 5% a media mañana. Las principales plazas financieras, como Fráncfort, París, Londres y Madrid, vieron caídas de entre el 3.9% y el 4.4%, con pérdidas superiores a los 1,500 millones de euros (alrededor de 1,640 millones de dólares).
Las bolsas de valores más afectadas fueron las de Asia, con importantes pérdidas en los índices Tokio registro una pérdida de 7.8%, Seúl un 5.6%, y Shanghái un 7.34%. En Hong Kong, el índice Hang Seng experimentó su peor jornada desde 1997, con una caída del 13.22%, lo que reflejó un escenario similar al de la crisis financiera asiática. Estos movimientos reflejan un creciente temor a las consecuencias económicas de una posible recesión global.
El anuncio de la administración de Donald Trump de imponer un arancel adicional del 10% a todas las importaciones entrantes a Estados Unidos, vigente desde el pasado sábado, ha aumentado las tensiones comerciales, especialmente con China y la Unión Europea. A esto se suman los aranceles adicionales previstos para productos chinos (34%) y de la Unión Europea (20%) en las próximas semanas. Estos desarrollos generan una atmósfera de incertidumbre, que afecta especialmente a los sectores más expuestos, como el tecnológico y el energético.
China ha respondido a las políticas arancelarias de Estados Unidos imponiendo tarifas adicionales del 34% a productos estadounidenses y restringiendo las exportaciones de minerales. Esta respuesta ha intensificado la confrontación comercial, lo que incrementa las preocupaciones sobre un posible estancamiento en las relaciones económicas entre las dos economías más grandes del mundo.
El temor a una recesión global ha llevado a los analistas a ajustar sus previsiones para los próximos meses. Se estima que la desaceleración económica podría extenderse a nivel mundial, afectando tanto a las economías emergentes como a las desarrolladas. En particular, se prevé que Estados Unidos podría enfrentar una recesión que dure hasta un año, lo que tendría implicaciones directas sobre el comercio internacional y las inversiones extranjeras.
El comportamiento de los mercados en este «lunes negro» resalta la vulnerabilidad de las economías globales frente a las políticas comerciales unilaterales. Las tensiones entre las principales economías del mundo continúan afectando las perspectivas de crecimiento global, y la incertidumbre se mantiene alta mientras no se alcancen acuerdos comerciales satisfactorios.
La guerra comercial sigue siendo un factor que podría desencadenar una recesión global, lo que hace imprescindible que los actores económicos internacionales encuentren vías para la cooperación y el diálogo para mitigar los efectos negativos sobre el crecimiento económico mundial.
Referencia Bibliográfica: El Economista. (07 de abril 2025). Lunes Negro en las bolsas por el temor a una guerra comercial a gran escala.
Información: El Economista
Fotografía: AhorroCapital