Opinión

Por el fortalecimiento interno de nuestro partido

Lázaro Jiménez Aquino*

El 17 de noviembre del año el Comité Ejecutivo Nacional (CEN), del Partido Revolucionario Institucional (PRI), fue condecorado a través de su organismo de capacitación, El “Instituto de Formación Política Jesús Reyes Heroles, A.C. (IRH)” por presentar el mejor programa de Educación Política del año, premio otorgado por Napolitan Victory Award.

Ningún triunfo en la vida es una presea individual, y este no es la excepción. Este galardón reconoce a la visión y liderazgo del diputado Alejandro Moreno Cárdenas, presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de nuestro partido y de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina (COPPPAL), así como de la secretaria general del CEN tricolor, diputada Carolina Viggiano Austria. Liderazgos partidistas conscientes de la importancia de la formación de cuadros.

Sin embargo, también se condecora a nuestras y nuestros militantes, cuadros y simpatizantes, ya que la materia prima de la formación y educación política son las y los ciudadanos que dan un paso al frente para dejar la inacción y el conformismo atrás y transitar a la acción política, a ustedes felicidades.

En la actualidad la ciudadanía reclama profesionalismo político, lo cual va más allá de la grilla, va más allá de los aforismos, de los gritos y los insultos para ser aclamado por las masas, el profesionalismo político desde la perspectiva del ciudadano de a pie, con necesidades y demandas, implica comprender lo que ocurre en la calle, lo que pasa en el campo, entender los factores que animan las problemáticas sociales y transmitir con la mayor sensibilidad social estas demandas a los órganos partidistas, legislativos, en las presidencias municipales y estructuras gubernamentales.

Pero, ¿cómo reconciliar el trabajo empírico, el trabajo en las calles, con los desarrollos científicos en las universidades? ¿cómo armonizarlo y llegar a la y el ciudadano de a pie para transformar su vida? Sería equivocado pensar que la respuesta es enviar a todas nuestras políticas y políticos a la universidad. Lo que se requiere es profesionalización y capacitación, es decir, la intersección entre el conocimiento y la piel social. México requiere políticos cada vez más profesionales y capacitados en temas científicos de vanguardia, forjados al calor de la pluralidad del debate, al tanto de los desarrollos de la iniciativa privada y siempre priorizando el trabajo de frente a la y el ciudadano, pero esto solo es posible a través de la capacitación.

La capacitación en materia política no es una capacitación para el trabajo, no es una capacitación para adquirir habilidades mecánicas, es capacitación para enfrentarnos a nuestro entorno, para entenderlo y tratar de cambiarlo, es una capacitación en favor del empoderamiento ciudadano y por tanto político.

Por lo anterior, desde mi trinchera como legislador y mi distinción como Presidente del Instituto de Formación Política Jesús Reyes Heroles, A.C. (IRH), continuaremos diseñando, ampliando y fortaleciendo diferentes líneas de acción que tengan como objetivo último contribuir al empoderamiento de nuestras y nuestros militantes, la piel del partido, es decir militantes empáticos, pero eficaces en su labor, a saber, representar causas ciudadanas.

 

* Diputado Federal y Presidente del IRH Nacional

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