Opinión

Los más pobres, principales víctimas de la 4T

Alejandro Moreno Cárdenas*

Morena pretende empantanar el debate público con falacias, la principal de ellas es que su prioridad son los pobres: falso. Ninguna de las propuestas de Morena está enfocada en sacar a los mexicanos de la pobreza, sino en construir en torno a ellos una demagogia que los perpetúe en esa condición.

El partido en el poder no está ampliando ni mejorando los servicios ni políticas públicas, que son los que verdaderamente permiten a las familias mexicanas superar desigualdades y salir adelante; muestra de ello es que hoy el acceso a los servicios de salud está prácticamente cancelado tras la desaparición del Seguro Popular y el desabasto insultante de medicamentos.

Hoy nuestros adultos mayores, jefas de familia y mexicanos con discapacidad tienen que emplear los recursos de programas sociales en comprar medicamentos que antes de 2018 el gobierno mexicano les proporcionaba directamente.

Hoy, las escuelas permanecen cerradas sin que la Secretaría de Educación Pública al mando de Morena cuente con un diagnóstico certero sobre los saldos que ha arrojado la pandemia, como por ejemplo ¿cuántos niños han abandonado sus estudios y tenido que auxiliar a su familia con alguna actividad remunerativa? No existe la información y a Morena no le interesa conocerla.

Y recordemos que lo que no se mide, no puede mejorarse ni corregirse.

Hasta ahora, Morena solo ha cancelado empleos y provocado el cierre de empresas. México dejó de ser un destino confiable para inversiones productivas.

Debido a la irresponsabilidad del partido en el poder, una de cada tres familias ha visto esfumados sus ingresos y sus integrantes sufren de hambre.

A pesar de que la pandemia sigue cobrando la vida de miles de mexicanos, principalmente los más pobres y vulnerables, Morena no se ha dignado a voltear a verlos ni corregir sus errores. Nuestros hospitales públicos y equipo médico siguen sufriendo la escasez de equipo de protección y de medicamentos, enfrentándose a jornadas extenuantes de trabajo debido a que, con la pandemia en el horizonte, Morena decidió despedir a miles de médicos y enfermeras.

El gobierno de Morena no solo no ha acabado con la corrupción que afecta a los más pobres de México, sino que ha puesto la mesa para que los corruptos se sirvan a su antojo a través de contratos millonarios asignados discrecionalmente, se construyan obras sin licitar, se ignoren reglas de transparencia y rendición de cuentas, se rematen bienes nacionales sin ningún rubor y se derroche el erario.

Desde el poder se ha pretendido ignorar la violencia e inseguridad que golpea al país entero, particularmente a las colonias más populares. El espejismo que en 2018 se disfrazó de “abrazos, no balazos” ha develado su verdadero objetivo: no hacer nada y abandonar a estados y municipios en esa tarea.

Todas y todos los mexicanos tenemos muchas cuentas que exigir a Morena, pero particularmente los más pobres, quienes han sido utilizados por un grupo de arribistas que no tienen vocación de servicio, sino de servirse y aprovecharse.

En el PRI vemos con preocupación el deterioro de la vida familiar, institucional y democrática. La ruta en la que Morena lleva al país es de destrucción e infelicidad. ¡No queremos eso para México! Estamos a tiempo de evitarlo y corregir el camino. Pedimos tu confianza.

 

*Presidente Nacional del PRI

Comentarios

Publicaciones relacionadas

Mira también
Cerrar
Botón volver arriba