Frente Amplio Cultural
Bismarck Izquierdo Rodríguez *
“Terminamos siempre por tener el rostro de nuestras verdades.” Albert Camus.
Se inició la búsqueda de simpatías por parte de los 12 aspirantes a construir el Frente Amplio por México al habérseles entregado sus constancias de registro a quienes manifestaron y acreditaron estar en condiciones de hacerlo.
Lo anterior es un ejercicio inédito en la historia de nuestro país, ya que no se había delimitado un proceso de tal naturaleza, colocando ante el “ojo público” a quienes hasta el día de hoy se han proclamado como los potenciales opositores al régimen oficialista.
La construcción del Frente Amplio implica un cambio de paradigma político, cívico y cultural, al procurar una dinámica de diálogo entre las partes, anteponiendo el proyecto a las propuestas y los intereses personales. Quienes en el pasado pudieron haber sido enconados rivales hoy son miembros del mismo equipo y con el mismo objetivo: la lucha política contra el oficialismo y su gobierno fallido.
Así como se deberán sumar y poner de acuerdo de aquí al 3 de septiembre los aspirantes a construir el Frente, también tal ejercicio acercará a liderazgos políticos y sociedad civil por la misma causa. En el sector cultural no será diverso y las diferentes disciplinas artísticas y sus liderazgos deberán definir si participarán o no de esta iniciativa, manifestando sus simpatías por el o la aspirante de su predilección.
Con base en la fallida gestión cultural pública del actual gobierno, artistas, gestores y espectadores valorarán si el Frente Amplio por México es una opción real para apoyar con miras a recuperar lo que se les arrebató durante más de 5 años. Los programas de becas, fondos, foros y sinnúmero de oportunidades perdidas se deben señalar en este diálogo frontal para construir un Frente más plural e incluyente. No se puede seguir ignorando a un gremio tan importante como toral para este momento en que se reflexiona la actualidad del país.
Si bien el hartazgo de hace un lustro les llevó a creadores y gestores a “confiar” en una opción ilusioriamente disruptiva, hoy los hechos los colocan en una coyuntura muy crítica. La politización de la cultura no habrá de extenderse y quienes promueven el desarrollo de la cultura se anticipa plantarán cara a este nocivo fenómeno.
En esta tesitura, el deterioro oficialista no deja afectar a millones de mexicanos día a día y la narrativa de la oposición seguirá encontrando más puntos en común. El Frente será fuerte y competitivo y materializará los anhelos de quienes ya no pueden sostener su circunstancia por culpa del oficialismo.
Finalmente se empieza a ver la luz y un panorama de rescate gracias a la definición del Frente Amplio; ahora habrá que esperar la sinergia que se logre de la mano de la sociedad civil para coordinar los mecanismos de consulta para la integración de la agenda política opositora, siempre contemplando los tiempos que marca la ley.
Nos mantendremos expectantes, el Frente Amplio llegó para quedarse.
*Secretario de Cultura del CEN del PRI